Beneficios de nombrar un Delegado de Protección de Datos (DPO)
El Delegado de Protección de Datos (DPO) es una figura que nace en el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) relativo a la protección de las personas físicas en lo que respecta al tratamiento de sus datos personales y a la libre circulación de estos datos, y que surge ante necesidad para las Organizaciones para establecer e implantar programas de privacidad efectivos, responsables, equitativos, transparentes, leales y lícitos. El DPO se convierte, así como la figura estandarte y defensor de la privacidad dentro de la Organizaciones.
Pero ¿que beneficios concretos aporta esta figura para las Organizaciones? A continuación vamos a enumerar los que creemos más importantes:
- Cumplimiento proactivo. Con la entrada del RGPD, se pasa de un cumplimiento reactivo a un cumplimiento proactivo, siendo el nombramiento del Delegado de Protección de Datos uno de los elementos más importantes del cumplimiento por parte de una empresa. Potencia la imagen del cumplimiento de la protección de datos.
- Medida de Responsabilidad Proactiva. Nombrar un Delegado de Protección de Datos es una garantía de cumplimiento que es altamente valorada por las Autoridades de Control. Ante posibles sanciones, será un atenuante para demostrar y defender la responsabilidad de la empresa.
- Reducción significativa de inspecciones. Si se ha designado un DPO, las reclamaciones interpuestas por los interesados ante la propia Agencia podrán ser derivadas al DPO para que este actúe como mediador y aporte soluciones a la reclamación, evitando un claro caso de inspección en caso de no haber un DPO.
- Reducción de sanciones. Ante posibles sanciones, disponer de un DPO será un atenuante esencial para demostrar y defender la responsabilidad de la organización.
- Mejora la imagen corporativa. Designar un Delegado de Protección de Datos proyecta valores de compromiso, transparencia y ética profesional.
- Favorece la creación de una cultura de privacidad. El Delegado de Protección de Datos es una figura imprescindible para “evangelizar” y difundir la cultura de respeto a la privacidad dentro de la Organización. Es un elemento facilitador e integrador del RGPD dentro de la Organización.
- Punto de Contacto con los interesados. El Delegado de Protección de Datos actúa como punto de contacto para atender a los interesados que se pongan en contacto para cuestiones relativas al tratamiento de sus datos personales y al ejercicio de sus derechos
- Privacy by Design. Es una figura fundamental para planificar e introducir la Protección de Datos desde el Diseño para realizar acciones y campañas para clientes.
- Punto de Contacto con la Autoridades de Control. El Delegado de Protección de Datos tiene preferencia en la comunicación con las autoridades de Control, esencialmente a la hora de realizar consultas legales.
- Ayuda indispensable en la gestión de brechas de seguridad. Si la organización sufre una violación de la seguridad de los datos personales, el DPD te permitirá actuar de forma rápida a la hora de paliar los efectos de la filtración o vulneración de la seguridad.
